Cientos de familiares y amigos visitaron ayer anticipadamente las tumbas de sus seres queridos para evitar las aglomeraciones que se forman cada año en el tradicional Día de los Fieles Difuntos, que se evoca hoy.
En el Cementerio General, los bloques de bóvedas estuvieron adornados con coloridas flores sintéticas que se colgaron a la altura de las lápidas.
Saba Uquillas, de 85 años, llegó al camposanto cerca de las 10:00 en compañía de Mariana Castro, su enfermera auxiliar, para visitar la bóveda de quien fue su esposo.
“Siempre es mejor traerla un día antes (del Día de los Difuntos), porque después es difícil movilizarse por aquí”, dijo la enfermera, quien se encargó de dirigir la silla de ruedas de la adulta mayor.
Clemencia Suárez fue otra de las personas que visitaron anticipadamente ese panteón. Sobre la tumba de su fallecido esposo colocó un ramo de flores que compró en las inmediaciones del cementerio, donde descansan 466 mil difuntos.
Fuente: El Universo
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