Jhonny Ibarra Delgado es un fan de Vicente Fernández. Ayer estaba en calle 12 de Marzo, en Portoviejo, desayunando.
Él aún tiene la esperanza de que su artista favorito llegue a cantar.
Es más, sugiere
que si las autoridades insisten en poner trabas al espectáculo, "Don
Chente" -como también se conoce al cantante- se presente en la vía
pública.
Jhonny califica como histórico un concierto de esta naturaleza en la capital manabita.
Pero el
optimismo de que el cantante mexicano llegue a Portoviejo el 23 de
septiembre, no solo es de sus seguidores, el sector hotelero mantiene la
expectativa.
Es el caso de
Oliver Vera, propietario del Hotel Ceibo Dorado, el cual había sido
contratado en su totalidad para que se hospedara el artista y sus
acompañantes.
El empresario
señala a El Diario que desde hace dos meses los organizadores del show
habían pagado el ciento por ciento del valor del arrendamiento de las 55
habitaciones, de forma exclusiva para el cantante, es decir que el día
que él se hospedara no había más espacio.
Señala que el
Servicio de Rentas Internas estuvo verificando la información y que
funcionarios del SRI preguntaron por el contrato de arrendamiento, pero
que ellos les mostraron la factura.
Vera también indica que estaba construyendo una suite para Fernández.
El Ceibo Real, otro de los hoteles del empresario, también está reservado completamente para la fecha del concierto.
Vera manifiesta
que la suspensión del show "es un daño tremendo para Portoviejo", porque
no solamente los hoteles se beneficiarían, sino también los taxistas,
los informales, entre otros.
Señala que la
capital provincial está en sus fiestas y que la gente está sedienta de
espectáculos de buena calidad. "¿Con qué alternativa vienen otras
personas a invertir en Portoviejo, si no se le dan garantías?", dice.
Otro de los
hoteles que tiene sus 37 habitaciones reservadas es el Ejecutivo. La
recepcionista Gabriela Mendoza comenta que clientes oriundos de Santo
Domingo, Quevedo, Santa Elena y La Concordia habían pagado por
adelantado para asistir al concierto.
EL ESTADIO. Una
de las incongruencias que se ha señalado para la realización del evento
es la capacidad del estadio Reales Tamarindos, la cual sería menor al
número de entradas que se promociona.
En un informe
que el 14 de agosto el comisario municipal de Portoviejo, Roger Macías,
eleva a Landy Cevallos Buenaventura, director de Comisarías y Policía
Municipal, se indica que la capacidad del escenario deportivo es de 28
mil personas.
Luego, en otro
oficio enviado el 7 de septiembre firmado por el mismo comisario, se
corrige la cifra y se indica que sólo 20 mil personas entran en el
estadio.
Macías señala
que su primer informe se sustentó en un oficio que él tenía con fecha 28
de mayo del 2010, año en que se realizó el concierto de "Don Omar" y en
el que el ingeniero Nilo Ramírez, administrador del estadio, le decía
que el aforo era de 25 mil personas.
Sin embargo,
dice que en la reunión que se desarrolló con la mesa de seguridad en la
Gobernación de Manabí se le dijo que volviera a solicitar la capacidad
del gramado y allí el 7 de septiembre le responden que era de 20 mil
personas.
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