El sombrero fino de Manabí en peligro de extinción

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Por: Paúl Panta

Los maestros y maestras tejedoras en su gran mayoría sobrepasan los cincuenta años, se corre el riesgo de que con ellos desaparezcan los secretos de la confección de este producto emblemático de la provincia.

Las maestras tejedoras en Manabí sobrepasan los 50 años, de no traspasar sus conocimientos este arte desaparecería.

Gobiernos locales como el Municipio de Jipijapa han iniciado una campaña turística y cultural para salvar este legado ancestral.

Un recambio generacional urgente a mediano plazo en los maestros tejedores de sombreros finos de paja toquilla, es lo que se busca urgente en Manabí, para salvar de la extinción esta tradición. 

En las comunas rurales  de Montecristi, Jipijapa y Manta apenas sobreviven en total, unos veinte y cinco expertos en la confección de sombreros finos.

El Ministerio Coordinador  de Patrimonio ejecuta un proyecto que recluta a los diestros tejedores para que enseñen  a los jóvenes comuneros este  arte, así se garantizaque el conocimiento ancestral no desaparezca y tampoco esta actividad. 

La iniciativa es integral, va más allá de salvar la tradición, el objetivo es motivar a los jóvenes para que además se integren a la cadena de comercialización y aseguren una ocupación redituable.

Un sombrero fino de alta calidad, es comercializado en el mercado local hasta en 400 dólares, pero en casas especializadas de Estados Unidos y Europa se los ha llegado a vender hasta en 15 mil dólares.  

En esta cadena de ventas, las ganancias mínimas son para los tejedores, mientras que los comerciantes intermediarios son los que más lucran, esta realidad es la que se busca cambiar.

Fuente: CiudadaníaInformada