Cientos de personas pugnaron ayer por adquirir boletos hasta Manabí, el destino que más demanda tuvo junto con los balnearios.
Discusiones por ingresar a las
boleterías, usuarios perdidos en filas que no eran las indicadas,
pasajeros que esperaron pacientemente para conseguir un boleto y que
después debían correr entre la multitud por los pasillos en busca de su
bus fueron algunas de las imágenes que se observaron la mañana de ayer
en la terminal terrestre Jaime Roldós Aguilera.
El Día de los Fieles Difuntos es uno de los feriados que moviliza a más personas a lo largo del país y ayer se notó eso en la demanda de pasajes. Pese a que el pasado jueves hubo mucha, la de ayer la superó.
A las 09:30, la terminal estaba copada de usuarios que pretendían salir de la urbe, a esa hora las filas daban la vuelta a los bloques de boleterías y se prolongaban por decenas de metros.
Uno de los sectores que mayor convocatoria provocó es el de las cooperativas que se dirigen a la península de Santa Elena. Juan Gonzabay afirmó que arribó a esta a las 06:00 y recién después de cuatro horas estaba a dos personas de poder comprar su pasaje.
El Día de los Fieles Difuntos es uno de los feriados que moviliza a más personas a lo largo del país y ayer se notó eso en la demanda de pasajes. Pese a que el pasado jueves hubo mucha, la de ayer la superó.
A las 09:30, la terminal estaba copada de usuarios que pretendían salir de la urbe, a esa hora las filas daban la vuelta a los bloques de boleterías y se prolongaban por decenas de metros.
Uno de los sectores que mayor convocatoria provocó es el de las cooperativas que se dirigen a la península de Santa Elena. Juan Gonzabay afirmó que arribó a esta a las 06:00 y recién después de cuatro horas estaba a dos personas de poder comprar su pasaje.
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